Un periodista hondureño condenado en 2016 por calumnia muere por COVID-19

0
1081
david romero
Familiares y amigos del periodista David Romero esperan a las afueras del Instituto Nacional Cardiopulmonar, El Tórax, donde murió el periodista este sábado en Tegucigalpa (Honduras). EFE

Tegucigalpa.- El periodista hondureño David Romero, quien estaba preso desde marzo de 2019 por calumnia e injurias, murió este sábado en un hospital de Tegucigalpa tras trece días hospitalizado debido a complicaciones a causa del coronavirus, informó su familia

Su esposa, la también periodista Lidieth Díaz, confirmó la muerte de Romero y dijo que «Dios sabe lo que hizo, él luchó hasta el final de su vida”.

Romero, de 65 años, fue ingresado el 5 de julio en el Instituto Cardiopulmonar, conocido como Hospital del Tórax, por sospechas de COVID-19.

Familiares y amigos del periodista David Romero esperan a las afueras del Instituto Nacional Cardiopulmonar, El Tórax, donde murió el periodista este sábado en Tegucigalpa (Honduras). EFE

Tras sufrir dos paros respiratorios, el periodista fue trasladado a la Unidad de Cuidados Intensivos siempre en el Hospital del Tórax, donde además recibió terapia renal debido a problemas en los riñones, según su familia.

«Se nos va el director y un amigo, los médicos manifestaron que él tenía problemas renales y con los pulmones, parece que el COVID-19 lo atacó y pese a las diálisis que se realizó, perdió la batalla», dijo Gustavo Blanco, periodista de Radio Globo, de la que Romero fue director.

Con la muerte de Romero suman tres los periodistas fallecidos en Honduras debido al coronavirus, enfermedad que deja hasta ahora 857 fallecidos y 31.745 casos positivos.

El comunicador fue acusado en 2014 por la exfiscal Sonia Gálvez de calumnia e injurias, y el 28 de marzo de 2019 fue arrestado en Radio Globo, donde estaba atrincherado, a pesar de que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) había pedido al Estado de Honduras que suspendiera la orden de captura.

Romero fue condenado a diez años de cárcel en marzo de 2016, la que fue ratificada en enero de 2019, por la comisión de seis delitos de difamación constitutivos de injurias contra Gálvez, y cumplía su condena en una unidad militar al norte de la capital hondureña.

Gálvez, esposa del exfiscal general adjunto de Honduras Rigoberto Cuéllar, logró que el periodista fuera condenado en 2004 a diez años de prisión por haber violado a una hija suya, quien lo denunció.

En 2002, cuando Gálvez era fiscal de la Mujer, denunció ante los tribunales a Romero por violación sexual a su propia hija biológica, por lo que el periodista fue enviado a prisión y cumplió varios años de condena y luego fue liberado por «buen comportamiento».

En principio, Romero negaba que había violado a su hija, pero después lo confesó.