La pandemia, ETA e IOTA, lo peor para Honduras en 2020

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EFE

Tegucigalpa – La pandemia de covid-19 y las tormentas tropicales Eta e Iota han sido lo peor que ha sufrido Honduras en 2020 en lo social, económico y ambiental.

La covid-19, además de los muertos y contagios, dejó a más de 500.000 personas sin empleo y paralizó su aparato productivo durante más de tres meses, lo que ha tenido graves repercusiones en la frágil economía del país, que no era de bonanza antes de que la enfermedad se comenzara a propagar.

La situación de Honduras se agravó con las tormentas tropicales Eta e Iota, que dejaron a miles de familias damnificadas y sin vivienda, además de graves daños a la infraestructura productiva.

Las pérdidas causadas por el parón provocado por la covid-19 y los efectos de Eta e Iota en Honduras superan los 100.000 millones de lempiras (más de 4.140 millones de dólares), según estimaciones de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y el Banco Central del país centroamericano.

Los daños que dejaron en noviembre pasado Eta e Iota equivalen a «45.676 millones de lempiras (1.879 millones de dólares), subraya el informe de la Cepal entregado el pasado día 22 por el delegado del ente, Omar Bello, al Consejo de Ministros de Honduras, que lidera el presidente hondureño, Juan Orlando Hernández.

A las pérdidas causadas por los dos fenómenos naturales se suma la crisis derivada de la pandemia de la covid-19 que, según el Banco Central de Honduras, superan los 55.000 millones de lempiras (2.264 millones de dólares).

El presidente del BCH, Wilfredo Cerrato, dijo que las pérdidas causadas por la covid-19 y las tormentas Eta e Iota suponen una «caída histórica de alrededor del 9 % al 10 %» del Producto Interno Bruto (PIB).

«Entonces, cuando sumamos el impacto de la producción, estamos hablando de un impacto fuerte de 100.000 millones de lempiras (4.143 millones de dólares), y este es un dato muy fuerte», explicó el alto funcionario.

Los daños de las tormentas son visibles en los cerros y montañas, con grandes derrumbes, lo mismo que en carreteras, entre principales, secundarias y terciarias, y puentes, entre otras obras de infraestructura. EFE