Un ambiente festivo, de paz, hermandad y catolicismo se vivió en el centro penitenciario de La Ceiba, Atlántida al inaugurarse el altar para la Virgen de la Merced, patrona de las personas privadas de libertad, acto que fue dirigido por el Padre Gilberto Tzaj Past y miembros de la Pastoral Penitenciaria.
En la ceremonia, se agradeció el apoyo recibido por las autoridades del Instituto Nacional Penitenciario (INP), del establecimiento y de la población privada de libertad que integran la comunidad católica que ahí convive y quienes a partir de ahora tendrán un lugar para reflexionar y celebrar sus actos religiosos.
Virgen de la Merced
El 24 de septiembre se conmemora de la Día de la Virgen de la Merced, que en la edad media fue designada como a patrona de los cautivos, de las personas que eran privadas de libertad, por lo que en muchos establecimientos penitenciarios de América Latina, se conmemora esta fecha en reconocimiento a la virgen que en la media demostró dedicación y vocación en la atención de las personas cautivas.
En los centros penitenciarios hondureños, las personas privadas de libertad comienzan las celebraciones desde el 21 de septiembre y durante varios días realizan diferentes actividades recreativas, culturales y espirituales, entre otras.
Libertad de cultos
En los establecimientos penitenciarios a nivel nacional, las personas que conviven en ellos participan en actividades religiosas que realizan los representantes de las iglesias Católicas y Evangélicas, ya que cada una cuenta con su propio espacio para realizar sus actividades, asimismo, disponen de diferentes horarios.
