Honduras inicia temporada de huracanes con temor por propagación de COVID-19

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Fotografía fechada el 30 de mayo de 2020 que muestra a ciudadanos hondureños mientras cruzan un río con el caudal alto, en Tegucigalpa (Honduras). Honduras, un país muy vulnerable, afrontará una temporada de huracanes "muy activa" y con el temor de que pueda sufrir una desgracia como la causada por el Mitch, que en 1998 dejó más de 5.000 muertos, lo que sería "desastroso" y podría favorecer la propagación del coronavirus, según expertos. EFE/ Gustavo Amador

Tegucigalpa– Honduras, un país muy vulnerable, afrontará una temporada de huracanes «muy activa» y con el temor de que pueda sufrir una desgracia como la causada por el Mitch, que en 1998 dejó más de 5.000 muertos, lo que sería «desastroso» y podría favorecer la propagación del coronavirus, según expertos.

La temporada en el Caribe, que comenzó este lunes, podría ser «muy activa», con hasta ocho huracanes, de los que cuatro podrían ser «muy poderosos», dijo a Efe el jefe de Meteorología del Centro de Estudios Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos) de Honduras, Francisco Argeñal.

Honduras ha sido catalogado como uno de los países «más vulnerables al cambio climático», derivado no solo por su pobreza y la falta de planificación, sino también por la propia topografía de la nación, señaló.

Argeñal indicó que para prepararse ante la temporada ciclónica en el Caribe, cada vez más extrema, y que finaliza el 30 de noviembre,  las autoridades deben trabajar en un «plan de adaptación» que pasa por organizar a la población y evitar que personas vivan en zonas cercanas a lugares vulnerables.

ESCENARIO COMPLICADO POR EL COVID-19

Debido a la falta de preparación para responder a un desastre natural, el Centro de Coordinación para la Prevención de los Desastres Naturales en América Central analiza el impacto de la temporada en medio de la pandemia por el COVID-19.

La posible llegada de un huracán a Honduras obligaría a las autoridades a habilitar albergues, lo que podría «agudizar el escenario de más propagación del virus», enfatizó Argeñal.

Desde que se confirmaron las primeras dos personas con coronavirus, el 11 de marzo, las autoridades sanitarias de Honduras han registrado, hasta el domingo, al menos 212 muertos y 5.202 contagiados, lo que dibuja un escenario complicado para los planes de protección civil frente a la época ciclónica.

El coronavirus ha venido a «entorpecer la organización» de las autoridades en materia de preparación frente a la temporada, subrayó el experto, quien además reiteró que la temporada de huracanes será «muy activa», lo que representa peligro para Honduras por su vulnerabilidad.

El peligro para el país «podría ser peor» por el coronavirus, expresó Argeñal.

HONDURAS NO SE HA RECUPERADO DEL MITCH

Honduras no ha logrado recuperarse completamente de los daños que dejó el Mitch, entre octubre y noviembre de 1998, que además de los miles de muertos y cuantiosas pérdidas materiales, sumó más de un millón de damnificados y un país totalmente incomunicado, con toda su infraestructura vial destruida.

Los daños materiales aumentaron el declive de la ya entonces debilitada economía del país centroamericano, que tiene 9,3 millones de habitantes y una extensión de 112.492 kilómetros cuadrados.

«Todavía tenemos ríos bastantes azolvados, que quedaron así desde el huracán Mitch, ya que no hemos hecho un sistema de drenaje, que es muy costoso, y eso viene a contribuir más a la amenaza de incrementar la vulnerabilidad», explicó Argeñal.

El funcionario teme que en Honduras pueda repetirse un huracán como el Mitch, de categoría 5, lo que sería «desastroso» para el país, donde el 60 % de sus habitantes son pobres.

Honduras necesita conformar ciudades capaces de manejar riesgos naturales y de adaptarse al cambio climático, además de generar resiliencia frente a los desastres, enfatizó.

PREPARACIÓN CONSTANTE

El antropólogo y escritor hondureño Mario Ardón dijo a Efe que Honduras requiere «una preparación constante» para crear las condiciones de respuesta frente a esos fenómenos.

Agregó que los cauces de ríos y quebradas del país hace 30 años tenían hasta 10 metros de profundidad, lo que permitía que las lluvias se filtrarán en el suelo y se diluyeran de acuerdo a una lógica de circulación del agua y humedad en el suelo, «pero ahora llueve y en menos de 15 minutos está seca la tierra».

Ardón destacó la necesidad urgente de hacer un estudio sobre la erosión y profundización de los cauces de los ríos, e instó a las autoridades hondureñas a localizar las regiones donde se pierden más cultivos por inundaciones y sequías.

En Honduras también es necesario hacer «una relectura del territorio y de la realidad de nuestras comunidades y de nuestro territorio, frente a una programación más consistente y más realista de la etapa de prevención y gestión de riesgos en tiempos de lluvias», subrayó el profesional, quien además es agroecólogo.

El 65 % de las lluvias deberían ser retenidas por los bosques, cultivos y pastos, mientras que el 35 % restante almacenadas en lagunas, lagos y represas, añadió el profesional.

MUCHA LLUVIA Y SEQUÍA AFECTAN

Honduras es uno de los países de Centroamérica más afectados por las inundaciones o sequías, cuya frecuencia ha aumentado en los últimos años el cambio climático.

Este año, luego de una severa sequía, Honduras ha recibido en los últimos días fuertes lluvias que han ocasionado tres muertos y daños materiales en varias regiones.

Lo bueno de las lluvias, es que han contribuido a que el campesino prepare tierras e inicie la siembra, además de apagar incendios forestales, que este año han dañado más de 39.400 hectáreas de bosques, y a aumentar el caudal de importantes represas que abastecen de agua a ciudades importantes del país.

Amanda, una tormenta tropical que se anticipó al inicio de la temporada de huracanes, está dejando intensas precipitaciones, por lo que las autoridades declararon alertas verde y amarilla, de prevención y precaución, en los 18 departamentos del país.

Las autoridades han advertido de posibles deslizamientos en las regiones centro, sur y occidente por las lluvias. EFE