Guatemala suma casi 10.000 detenidos por violar toque de queda en la pandemia

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Guatemala registró su primer caso positivo del COVID-19 el 13 de marzo pasado tres días después Giammattei decretó la suspensión de clases y del transporte público, además del cese de labores a nivel público y privado y cierre de fronteras.

Guatemala– La Policía Nacional Civil de Guatemala informó este domingo que ha detenido a casi 10.000 personas por infringir el toque de queda parcial que impera en el país desde el pasado 22 de marzo, cuando se prohibió a las personas salir de casa entre 4 de la tarde y 4 de la mañana del día siguiente, para frenar el coronavirus.

Desde las 16.00 horas del pasado 22 de marzo, hasta las 4.00 horas de este domingo, la Policía ha detenido a 9.850 personas que han violentado el toque de queda, formulado por el Gobierno para reducir la curva de contagios de coronavirus, que continúa creciendo, con 155 casos positivos, cinco fallecidos y 19 recuperados, en total.

El toque de queda ha sido evadido en su mayoría por hombres, que suman 9.282 detenciones, en estas tres semanas de aplicación.

El pasado jueves, el presidente guatemalteco, Alejandro Giammattei, médico y cirujano de profesión, adelantó que la noche de este domingo anunciará medidas económicas y sociales a implementar a partir del lunes, como el uso obligatorio de la mascarilla y una multa para quienes no lo hagan.

Los 16 millones de habitantes en el país, además de vivir bajo el toque de queda desde el pasado 22 de marzo, también tuvieron prohibido trasladarse de un departamento a otro durante la presente Semana Santa, en la que tampoco se celebraron públicamente las tradicionales y masivas procesiones.

El mandatario guatemalteco explicó durante la semana que «lo peor» está por venir para Guatemala, aunque también contempla la apertura de «centros comerciales» la próxima semana dependiendo de la situación del país, que ya cuenta con casos comunitarios y que el pasado jueves aumentó un 45 % de casos positivos.

Semanas atrás el gobernante indicó también que el pico de la enfermedad podría llegar a Guatemala entre finales de abril y los primeros 15 días de mayo.

Giammattei ordenó una suspensión de labores el 16 de marzo y también el cese del transporte público, además de cerrar ese mismo día las fronteras -salvo la vía terrestre con México para repatriar guatemaltecos-.

Un día después, sin embargo, reculó en la normativa referente al trabajo y aseguró que cualquier empresa que quisiera podía continuar sus labores si lo notificaba en línea y conseguía transporte privado para sus empleados. EFE